Son las 7:07 de la noche de un día cualquiera “13 de Enero del 2.011” salgo a caminar después de mas de tres meses de no hacerlo, y también muuucho tiempo sin trotar, en realidad no es mi habito precisamente trotar, era mas de tae-bo y ejercicios que de eso. En mas de un año ya he adelgazado mas de 18 kilos pesaba 83 kilos, caminando, comiendo sabiamente lo he logrado, he generado un cambio, pero esta noche salí decidida a caminar hacia Los próceres con la meta de darle una vuelta, solo una trotando con mi escoliosis incorporada, simple verdad? para el que está acostumbrado, pero para mi no, para el que tiene experiencia, para el que ya se le convirtió en hábito, para el que se siente motivado por algo, para el que lo hace quizá por alguien o por el que dirán, fácil verdad? Para ellos... Pero no para mi...porque es mi cuerpo a el que le duele, ya hay mas de 18 kilos menos de impacto sobre mi columna lo cual me motiva a hacerlo, solo tomé una DECISIÓN y salí a paso rápido como siempre, con temor, temor de la inseguridad de mi ciudad, lo que me había puesto en stand by para no seguir caminando como todos los días hace tres meses, empiezo a dudar al ir a dos cuadras y pienso:
–“Me devuelvo y le digo a mi vecino que también
es deportista y me ha dicho varias veces para ir en grupo y no lo he hecho” lo
dudo varias veces , me detengo un poco porque he pensado que cuando dudo algo
es mejor no hacerlo. Pero esta vez dije que necesito hacerlo, sola, por mí, es mi
meta y la tengo que cumplir sola, si salgo con alguien me distraigo y mi meta se aleja
mas o se tarda mas o simplemente no la hago, eso pasaría, así que deseo culminar la vuelta
a Los próceres trotando y en ese momento quiero estar sola.
Continúo caminando, son
como 1500 metros para llegar. En el cruce de la avenida, la luz del semáforo está en rojo,
cruzo, soy muy cuidadosa siempre con eso… pero a 10 cm exactos un motorizado me
frenó encima… casi me atropella, me sobresalto pero continuo sin darle importancia,
tolerando otro abuso. Sigo caminando y voy pensando después
-“Será una señal de que no
vaya? Pues no lo sé, pero me digo que Papito Dios está conmigo y mis deseos son
más fuertes que mis miedos. Siento que hay algo
diferente en mí, y siento que
todos lo notan, pero quizá son solo cosas mías. Quizá mi mundo esté cambiando y sólo
proyecto mis cambios en él. Consecuencia natural. Llego y empiezo a trotar, voy por mis
5 minutos y siento que se me hace difícil respirar así que trato de respirar mejor, y me
da pena mi tracerito, tengo que trabajarlo tanto y si troto se nota mas...
-Que
horror! Me da pena pero no me importa, siento que es mejor ser EJEMPLO de que
he decidido hacerlo, mientras que muchos sólo esperan a que pase la vida,
yo lo hago
por mí, pues yo estoy ahí trotando con firmeza
cada paso hacia adelante, si me duele lo sé
yo, si me cuesta respirar lo siento yo, voy por mis 12 minutos y siento que no
podré hacerlo
-Bueno solo llegaré hasta la mitad y lo demás lo hago
caminando, lo
importante
fue que vine, pero no, no me doy por vencida y continúo
–Pero ya, ahora sí no puedo,
me cuesta mucho respirar, no consigo exhalar hondo voy por mis 15
minutos, rápido
no? Pero para mí no, a mí me cuesta, no tengo la
preparación, no tengo ni siquiera los súper
zapatos adecuados pero tengo las ganas de hacerlo muy bien; 15 minutos,
no es nada,
Y
así de un “simple trote” que vemos por encima… a la firma de un divorcio que
hice esta mañana
de un día cualquiera de Enero…donde se acaba el sueño que me lleno de
tantas esperanzas
y alegrías. Pero es muy irónica la casualidad pues fueron 19 años en 19 minutos
y no los
medí a propósito y el hecho de que los 15 minutos fueran los mas
difíciles tampoco, pero yo
hice todo lo posible y logré lo que necesitaba… dar lo mejor de mi.
Y este
esfuerzo representó ver toda mi vida con la meta de siempre lograr un
fin.
Fácil?
Pero es que eso depende del peso sobre mis zapatos, cómo saber si aguanto?
Eso sólo yo
lo sé, porque sólo a mi me duele. Yo hice los zapatos, el paisaje por
donde trotar, las metas,
el estar y no estar, lo correcto y lo incorrecto, el tiempo, las ganas, lo
mejor y lo peor, yo lo di
todo pero cuando no se está preparado para la acción del esfuerzo, es fácil
caer y a pesar
de los resultados, se mantuvo, fueron 19 años en pie sin puente ni apoyo, pero
existió y ahí
están mis dulces bebas, dando prueba de lo que soy. Cuánto se resistiría?
Igual sería? No lo se,
porque se da lo que se puede, lo que se sabe o lo que se quiere. Yo solo
ahora se que solo
con fe en ti mismo, creces, sin importar cuanto dolió, existió.
Grecia Ríos
Enero 2011
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