sábado, 22 de octubre de 2011

"Enseñanzas del Pequeño Reto"



 


Primera parte salir a trotar es una decisión, que cuesta ya que ha pasado mucho tiempo, cuando decides terminar con el ayer es una super decisión. Solo la perseverancia lleva a lograr algo, 18 kilos menos me demuestra que soy capaz de generar cambios… mi escoliosis…el peso del pasado acuestas que lo llevo conmigo y como todos cada quien sabe  que  ha llevado a cuestas, los esfuerzos que se han hecho y lo que  ha dolido. Cada quien conserva su propia opinión, cada quien cree que lo que le sucede a los demás es fácil, porque estamos acostumbrados a una rutina del día a día, a la experiencia de lo que hemos vivido y siempre pensamos que hemos hecho un súper esfuerzo juzgando que  quizá los otros no han vivido nada,  quizá se hace fácil para el que mecánicamente hace las cosas  por alguien, motivado por terceros, pero cuando las circunstancias nos enfrentan  y decidimos que esta vida solo es para ti y no te puedes aferrar a nadie, es diferente, quizá es fácil para el que simula vivir en un mundo perfecto cuando se desborona  cada noche   por dentro.

Yo se que he vivido y nadie mas sabe cuanto se amó o cuanto se hirió, que tan duro o fácil fue. Ya hay algo que me pesa menos, ya me he liberado un poco del pasado en mi espalda y eso me ayuda a tomar decisiones nuevas con miedo pero  ya no tanto como antes, cambio mas fácilmente  de paradigmas. Las dudas nos hacen ser difíciles y no darnos por completo, ellas me llevaron a pensar que era tan maravillosa pero que era mejor estar sola pero solo es mi miedo, miedo a distraerme, a alejarme de lo que quiero, a que me impacten y me duela tanto que ya no sienta dolor otra vez, pero muy dentro de mi había algo que me decía que era mejor así, esta batalla conmigo misma es a solas, lo cual me obligaba a abandonar a quienes me aman y los que  quizás me amen.  Conseguí  obstáculos y abusos que me hicieron creer que me ivan a derrumbar como lo de la moto, pero ya no lo hacen porque ahora apuesto por mí. Los abusos han estado y yo no he sido fuerte, pero esta vez es distinto.

Sólo decido y lo hago, es fácil ahora para mi, hay compromiso, y el mejor de todos…conmigo misma. A pesar de lo difícil que pueda parecer algo, desde mis 17 cuando  tuve a mi primera beba, hasta este día del pequeño reto, doy cada día con amor, con todo lo que se, con una mujer ahora mas Grecia, con mis orígenes poco estables, con los complejos que a todos nos embargan como por ejemplo lo del traserito, pero he decidido ser ideal, ahora mucho mas del que he sido, y sin darme cuenta de que he herido a tantos al verme sufrir. Así que para mis veintes lo hice muy bien, un matrimonio y tres bebas, bellas, inteligentes y sanas, no sabia si seria difícil, si me rendiría, solo quería mantener el estandarte aunque me costara respirar muy adentro llenando mis pulmones, que me llenara el alma no podía, porque luchaba por algo no definido… yo misma.

15 años que para los demás no son nada, 15 minutos de cualquier día que ya no recordamos, se resumiría así. Pero esos 15 años de matrimonio hicieron nuestra historia, nuestras hijas y lo hicimos juntos con lo malo y lo bueno, pero lo hicimos… de 19 años en total juntos, con los bellos recuerdos, con nuestros terribles traumas pero fue “La historia de nosotros”.

Pero nada sucede por casualidad, todo tal cual como esta sucediendo me esta llevando  a valorarme y a valorar, a lograr un digno fin.

Mis lagrimas ya no son frecuentes estoy mas fuerte, ya no pueden ponerme contra el paredón, ya mi pasado no me pesa como ayer, no pueden juzgarme ni alegrarse porque yo no lo he hecho o simple... porque no saben si aguantarían el peso que yo llevé  sobre sus zapatos.

Lucharé y no lo haré por nadie ni siquiera por mis bebas, es por mi y a consecuencia de verme feliz ellas también lo serán, que difícil es entender esto, me costo 19 años y la experiencia también  de este año y medio que me hizo ser mejor.

Yo cree mi mundo, mi familia, hice los bloques y los pegue para hacer los muros a los lados, yo misma me puse frente a el muro para defender y hasta para apedrearme también,  pero de igual modo tejí la cobija para abrigarnos con gran amor.

Yo creí en nuestra historia mientras la iba creando y me siento feliz de ver a mis hijas y sentirme orgullosa de ellas. No es fácil pero los resultados de lo que decidimos ahora son mejores, porque hubo un peso que dolió soportar al ver por fuera lo que cada uno en realidad llevó.

Cuando te amas a ti mismo... Sabrás amar de verdad, cuando te das cuenta de cuanto heriste y  cuanto dolió, cuando el tiempo a solas te sanó y viste que eres el mejor, porque has superado todo y sigues adelante y asi siempre será mejor! 

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